Sony y Tencent han puesto punto final a su disputa legal por un presunto clon de Horizon Zero Dawn. El caso giraba en torno a Light of Motiram, un proyecto respaldado por Tencent que, según Sony, calcaba elementos clave del universo creado por Guerrilla Games. El acuerdo se ha cerrado de forma privada, sin veredicto en los tribunales ni detalles públicos sobre posibles compensaciones o cambios en el juego.
De qué iba la demanda
Todo arrancó cuando tráilers y materiales promocionales de Light of Motiram empezaron a circular y las comparaciones con Horizon Zero Dawn se hicieron virales. Según Kotaku, los parecidos incluían diseños de fauna mecánica, el estilo de los entornos y el tono general del mundo. La comunidad no tardó en etiquetarlo como un clon, lo que empujó el asunto al primer plano antes de que Sony moviera ficha.
En su queja, Sony argumentó que Light of Motiram tomaba prestada, en exceso, la identidad distintiva de Horizon en lugar de limitarse a inspirarse en el género de la ciencia ficción. Los puntos de fricción abarcaban siluetas de personajes, criaturas robóticas y elementos de world-building que, según la compañía, podían generar confusión sobre el origen del juego.
Qué pasa con Light of Motiram tras el acuerdo
El pacto entre las partes no incluye admisión de culpa por parte de Tencent. Ambas empresas optaron por resolver el conflicto de manera privada y mantener los términos bajo confidencialidad, así que no hay confirmación oficial sobre si habrá rebranding o cambios visuales en Light of Motiram. El proyecto sigue figurando como en desarrollo, aunque su presencia pública se ha enfriado notablemente desde que estalló la polémica.
Analistas del sector señalan que este tipo de acuerdos suelen incluir compromisos que no trascienden. Aunque Sony ha logrado cerrar el frente legal, la falta de transparencia implica que quizá nunca sepamos cuánto se ha modificado el juego durante su producción a raíz del caso.
Por qué importa para la industria
La disputa por Horizon subraya una tensión creciente en el desarrollo moderno: la delgada línea entre inspiración e imitación. Con presupuestos al alza y franquicias cada vez más valiosas, los editores protegen con celo su identidad visual y su IP. El escrutinio sobre títulos emergentes, especialmente aquellos con grandes inversores detrás como Tencent, es más intenso que nunca.
También es una muestra de cómo la reacción de la comunidad puede escalar hasta tener consecuencias legales. Las comparaciones en redes y foros catapultaron a Light of Motiram al centro del debate mucho antes de que Sony interviniera. Para los estudios, el mensaje es claro: cuanto más específica sea la semejanza con una marca reconocible, mayor el riesgo.
Contexto y antecedentes
La saga Horizon, firmada por Guerrilla Games, se ha consolidado como uno de los pilares de PlayStation gracias a su mezcla de mundo postapocalíptico y criaturas robóticas, con entregas como Horizon Zero Dawn y Horizon Forbidden West. Su estética de fauna mecánica y su construcción de mundo son rasgos muy identificables que la comunidad detecta de inmediato en otros proyectos.
Casos similares han salpicado la industria en los últimos años. Títulos móviles acusados de replicar la fórmula de battle royale se han enfrentado a demandas que acabaron en acuerdos o retiradas, y fenómenos como Genshin Impact vivieron fuertes comparaciones con The Legend of Zelda en el debate público, aunque no derivaran en litigios. En todos ellos late la misma cuestión: cómo proteger el look and feel de una franquicia sin frenar la creatividad ni la evolución de géneros enteros.
Con el expediente ya cerrado, Sony puede centrar esfuerzos en el futuro de Horizon, mientras Tencent despeja ruido legal alrededor de Light of Motiram. Falta por ver si el juego reaparece con una imagen renovada, pero el mensaje que deja este caso es inequívoco: las editoras de primer nivel están dispuestas a defender sus buques insignia con todos los recursos a su alcance.
