Si te parecen demasiado complejos los juegos de Paradox, el nuevo título de Black Sea Games es una buena introducción al género de estrategia global en tiempo real. Con nuestros consejos y trucos para Knights of Honor II: Sovereign lograrás que tu imperio sea el más poderoso del mundo y construir tanto ejércitos fuertes como una economía próspera.
1) Consejos generales para un buen comienzo
Tener uno o dos comerciantes en tu corte es importante para ganar dinero en Knights of Honor II: Sovereign. Envíalos a los países con los que quieras negociar acuerdos comerciales. Ten en cuenta que el acuerdo por sí solo no genera ingresos: solo cuando tu comerciante recibe la comisión para comerciar con ese país se realiza la transacción.
Al comienzo de la partida, es recomendable construir una milicia de pueblo. Con esta milicia podrás defender eficazmente tu reino sin necesidad inmediata de cuarteles. También puedes enviar tus ejércitos a través de países neutrales, aunque eso cambiará su opinión sobre ti. Lo mejor es pactar no agresión y acuerdos comerciales con las naciones con las que quieras mantener la paz.
Ten en cuenta que si despides a un caballero en Knights of Honor II: Sovereign, no volverá y se pierde para siempre. Si un caballero te dará una petición, no tienes que aceptarla o rechazarla de inmediato; puedes pensarla. Además, un caballero —a diferencia de un rey— no puede morir de vejez: salvo que sea asesinado, muera en batalla o logre convertirse en rey por medios complejos, permanecerá contigo indefinidamente.
Organiza al menos un mariscal lo antes posible para proteger tu país y asegúrate de nombrar a tus caballeros como gobernadores. Esto les permitirá gobernar tus provincias y generar buen oro para la tesorería. Envía un diplomático a imperios con los que no tengas buenas relaciones para evitar guerras y estabilizar la situación. En tus propios territorios es importante mantener la corrupción baja y la autoridad alta.
Cualquier caballero que no sea mariscal no necesita habilidades militares en Knights of Honor II: Sovereign. Serían un desperdicio en diplomáticos y espías, salvo en situaciones excepcionales en las que tus provincias estén siendo invadidas. Las habilidades se adquieren invirtiendo en libros y oro. En el mismo menú donde las compras también puedes subir su nivel; solo haz clic de nuevo en la habilidad correspondiente.
2) ¿Cómo funciona el sistema de caballeros?
Hay cinco tipos de caballeros en Knights of Honor II: Sovereign. Además de tu soberano, cuentas con ocho espacios libres para usar durante la campaña. A continuación se describen los roles principales:
- Mariscales: Comandan tus ejércitos y son esenciales en las batallas. También mantienen el orden en tus tierras y aumentan la moral de las tropas.
- Diplomáticos: Mejoran y apoyan tus relaciones con otros reinos. Pueden negociar pactos de defensa o ataque. Las provincias gobernadas por diplomáticos reciben un bonus en producción de comida y comercio.
- Comerciantes: Son tu principal fuente de ingresos. Cierran acuerdos comerciales y se encargan de importar bienes a tu imperio. También buscan nuevas riquezas y te aportan ingresos continuos.
- Clérigos: Mejoran la fe y el conocimiento de tu reino. Permiten sofocar rebeliones de forma pacífica y convertir a la población de una provincia a otra religión. Conservan la cultura y mantienen la satisfacción espiritual.
- Espías: Se usan para infiltrarse en enemigos y en imperios neutrales. Proporcionan información valiosa sobre ejércitos enemigos, mercancías que ofrecen otros países y sus condiciones de producción. Las provincias gobernadas por espías obtienen más beneficios fiscales y de oro. Además, con ellos puedes iniciar guerras, provocar rebeliones y sobornar a los caballeros enemigos.
3) Knights of Honor II: Sovereign consejos de gestión de provincias
Mientras no controles más de nueve provincias, es buena idea nombrar a un caballero como gobernador en cada una. Esto aumenta las tasas de producción allí por un factor de 10. A medida que avance el juego deberás colocar a tus gobernadores en las zonas estratégicamente más importantes.
En provincias fronterizas con territorio enemigo deberías construir cuarteles para reclutar unidades militares sólidas. Los países sin salida al mar dentro de tu imperio, en cambio, no necesitan su propio ejército local por el momento.
En las primeras horas de Knights of Honor II: Sovereign es importante poner en marcha acciones que aumenten población, reservas de comida y oro. Por ello, enfócate en producir los bienes propios de cada provincia. Por ejemplo, si una provincia tiene trigo, mejora y potencia su producción para obtener bonos útiles sobre ese producto.
4) Consejos sobre la economía
El siguiente punto de nuestros consejos se refiere a la economía. Tu objetivo principal debe ser que los ingresos provenientes de la agricultura y de los edificios de producción de alimentos sean sólidos.
Tu pueblo necesita comer; nada reduce la moral de las tropas y tu autoridad más que el hambre. Puedes exportar excedentes de alimentos a otros países mediante los contratos comerciales de tus comerciantes.
Cada bien que produces o importas te otorga un bono pasivo. Recursos como libros o tradiciones también dan bonificaciones, incluso cuando se alcanza el tope de existencias. Para algunas mejoras de edificios no solo se requiere oro, sino también bienes como tinta o lana.
Cuando todos tus espacios de caballeros estén ocupados, coloca a los gobernadores donde tengas las mejores condiciones de producción. Una excepción son las épocas de guerra, cuando necesitas a tus mariscales en el frente.
5) Consejos sobre guerras y batallas en Knights of Honor II: Sovereign
Guerras
Y hablando de tiempos de guerra: lo ideal es que tus tropas estén comandadas exclusivamente por mariscales. Otros caballeros no son muy adecuados para ello y deben usarse solo en emergencias. Mientras no tengas dinero para cuarteles, puedes reclutar milicias de pueblo, que son superiores a los bandidos campesinos iniciales.
Al enviar a tus soldados, recuerda que cruzar ríos toma significativamente más tiempo que una ruta por tierra firme. Para aprovisionarte en el camino puedes saquear y quemar aldeas, lo que también aumenta tu bolsa de oro. El número de símbolos de moneda sobre un territorio indica lo lucrativo que es el destino; si hay tres o más, el saqueo es extremadamente rentable.
Si acabas de conquistar una provincia, no todas las funciones del lugar estarán disponibles de inmediato. Debes primero terminar la rebelión, ya sea con tu ejército o de una manera más elegante mediante un clérigo. Tus tropas y suministros no se reponen automáticamente durante una campaña; puedes obtener provisiones en ciudades que sean amistosas contigo.
Batallas
Las batallas se libran en tiempo real en Knights of Honor II: Sovereign, al estilo de un juego como Total War. Las batallas perdidas suponen la pérdida total de tu ejército. Si se hace evidente que tu enemigo tiene la ventaja, lo mejor es retirarse manualmente. Una batalla se considera perdida o ganada cuando un bando se queda sin general. Los generales no mueren inmediatamente, sino solo cuando todos los soldados de su unidad han sido eliminados.
Puedes cerrar filas ordenando a las tropas que se agrupen, ya sea para protegerte de cargas de caballería o para rodear y hostigar al oponente. Usa unidades a distancia para asedios y unidades cuerpo a cuerpo para el campo abierto. Hasta cuatro ejércitos de más de 100 unidades militares pueden combatir simultáneamente en tiempo real.
6) Consejos de diplomacia
Como en los juegos de Paradox, fortalecer las relaciones con un reino amigo es más fácil si casas a tus hijos con su familia real. La muerte de un rey también implica la pérdida de pactos de no agresión y otros tipos de alianzas: estos deberán renegociarse con el sucesor. Si logras casar a un hijo en otro país y su rey fallece, puedes reclamar su reino y recibirlo gratis.
Si no reclamas un reino tras la muerte de su monarca, obtendrás un fuerte bono en las relaciones con el heredero. Liberar prisioneros también mejora las relaciones con la nobleza. Los diplomáticos no siempre han de estar enviados al extranjero: muchas opciones de alianza siguen disponibles y dejar a un diplomático en casa puede reforzar tu reputación ante el pueblo.
El valor de tu autoridad depende principalmente del éxito de tus acciones. También puedes usar oro para ayudar a la IA: haz clic en el icono de la corona e invierte. Cada clase poblacional favorece ciertas actividades: para los soldados, las victorias son cruciales; para los comerciantes, la situación económica. Revisa periódicamente tus territorios para detectar espías. No solo tú puedes enviar espías, también tus enemigos pueden hacerlo.
7) Ganar dinero en Knights of Honor II: Sovereign
Aquí tienes una forma de generar ingresos. Para tener éxito, implementa estos puntos lo antes posible:
- Firma un contrato comercial con el imperio más poderoso.
- Nombra caballeros como gobernadores en todas las provincias.
- Minimiza la corrupción y refuerza la autoridad.
8) Consejos sobre edificios
Al principio enfócate en edificios que produzcan comida o favorezcan el crecimiento demográfico local. Revisa tus territorios en Knights of Honor II: Sovereign en busca de recursos útiles, como la presencia de una mina de oro o de sal, y luego céntrate en explotar ese recurso. Puedes ignorar inicialmente edificios como universidades o castillos: mucho más importantes son la vivienda, las fuentes de ingresos y la producción de bienes.
Durante la construcción, el número delante de un edificio te indica cuántos ya existen en tu reino. Además del oro y los bienes, algunos requisitos de construcción pueden estar ligados a un cierto valor de fe. Al mejorar un edificio, la actualización se aplica automáticamente a todos los edificios similares en todo el imperio.
Conclusión
- Empezar con comerciantes y una milicia de pueblo te dará estabilidad económica y militar en las primeras horas.
- Usa los distintos tipos de caballeros según sus fortalezas: mariscales para la guerra, diplomáticos para relaciones, comerciantes para ingresos, clérigos para el orden interno y espías para información y acciones encubiertas.
- Prioriza la producción de alimentos y recursos locales, nombra gobernadores en provincias clave y mantén baja la corrupción para maximizar ingresos.
- En guerra, confía en mariscales y conoce la importancia de la logística (ríos, suministros, saqueos) y de las formaciones en batalla.
- La diplomacia y los matrimonios pueden abrir caminos para expandir y consolidar tu poder sin recurrir siempre a la guerra.
Gracias por leer!